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Principios fundamentales

 

 

1. Principio ético de la excelencia

 


"Las menudencias hacen la perfección, pero la perfección no es una menudencia"

Miguel Ángel Buenarroti



Para Herrera & Hidalgo la excelencia es un principio ético. Nuestro principal objetivo es alcanzarla en nuestro trabajo con los medios materiales y humanos con los que contamos, bajo un dominio de exigencias rigurosas, teniendo a la nobleza como única virtud y no perdiendo de vista que lo que hacemos es en gran parte lo que somos. La guía para cumplir con este compromiso ético está constituida por “El Manual de Procedimientos” y las "Normas de Régimen Interno", cuyos fines últimos son satisfacer las necesidades y expectativas de nuestros clientes. Estas guías  suponen una ayuda para  cumplir con los requisitos básicos para optimizar la calidad de nuestros servicios, los servicios que el despacho presta a sus clientes y los que el personal presta a su despacho. Para conseguir este objetivo, cada día adquiere mayor importancia adoptar sistemas de trabajo orientados a la calidad, para lo cual se deben de establecer técnicas por las que regirse. "El Manual de Procedimientos" constituye una herramienta que sistematiza el modo de trabajar y que aúna  criterios, disminuyendo con su observación los errores humanos. En este sentido todo el personal debe volcarse, para seguir los criterios marcados y para dar ideas que unan preguntas con respuestas, pensamientos con acciones y estrategias con resultados.


Todos los componentes de nuestra organización se deben implicar en focalizar todos sus esfuerzos en mejorar el sistema de gestión de calidad, incrementando constantemente la eficacia de los procesos de prestación de servicios. En este sentido es precisa una evaluación permanente para revisar y adaptar los procesos, de modo que se consiga un grado de satisfacción global de los clientes de la empresa y de toda la organización,  según las directrices marcadas.

 



2. Virtud de la Nobleza



"La grandeza es un estado del espíritu"

Matthew Amóla

 

La nobleza supone ver siempre las cosas con altura de miras, supone autoestima, saber que cada uno de nosotros valemos mucho, pero que nos necesitamos mutuamente. Tú vales mucho,  pero  ¿qué puedes hacer solo? El principio fundamental por el que se deberá regir el comportamiento de todos nuestros profesionales será la virtud de la nobleza, puesto que el actuar bajo este principio implica la integridad, la lealtad, la independencia, la dignidad y el respeto y la confidencialidad. Todos los grupos que nos relacionamos somos importantes, la nobleza está en reconocer que por sí solos no podremos alcanzar nuestros fines, nos necesitamos mutuamente, y en esa relación necesaria ha de primar la altura de miras y de valores.